Onboard: El "futuro" de los superhéroes

 ¡Buenos días! 

Tuve la suerte de que esta entrada fuera publicada en el blog de Gamifica tu aula, al cual podéis acceder a través de este enlace. Os dejo aquí dicha entrada.

El otro día, con motivo de trabajar el futuro usando “will”, se me ocurrió que podíamos darle un tono algo más “épico”. Así que, armado con los Story Cubes de lugares y acciones, y el juego POW!, me lancé a ello. 

Antes de nada, decir que el juego POW! es un juego bastante desconocido, ya que su mecánica es muy sencilla, pero que su ilustración y narrativa son maravillosas. Básicamente, en el juego encarnas a un dibujante de cómic que tiene que coger a superhéroes y supervillanos para componer su historia. No obstante, el juego termina ahí: el jugador que más puntos consiga combinando superhéroes y supervillanos, ha ganado. 

Al tener unas reglas muy simples, el juego da juego (dada la redundancia) a la hora de sacarlo de su contexto. Lo primero que hicimos fue calentar un poco con los story cubes. Usando un mapa de Europa, y con los story cubes de acciones, fuimos yendo desde Madrid hasta Estocolmo usando diversas acciones, tales como “saltar el canal de la Mancha” o “usar la varita mágica para transformar el mapa de Europa en una alfombra voladora”. 

Una vez realizamos esa primera actividad, repartimos los héroes y villanos. Lo primero que tenían que hacer era darle nombres a esos personajes, y sus habilidades (tanto las buenas como las malas). Nombres tales como “Broomface mcBroom” o “One momento, please”, así como “Crazy Pigtail girl” fueron apareciendo, junto a sus habilidades como “golpear salvajemente con la escoba” o “cansarse a los 5 segundos”. 

Teniendo eso en mente, fuimos construyendo las historias, con la ayuda de los Story Cubes de acciones y lugares, y las losetas de los superhéroes y supervillanos. Lo único que tenían que cumplir era una simple premisa: la historia debía estar contada en un “futuro” en el cual se utilizara la partícula will. La historia se iba articulando poco a poco, hasta que tuvimos nuestras historias, ¡algunas de las cuales son oro puro! 

Y hasta ahí la experiencia, espero que os haya gustado.

Andrea, Calcetines y Miguel nos despedimos hasta la siguiente entrada.